
Cómo funcionan las cosas
En esta serie, exploramos las funciones exactas de algunos elementos clave de la fe. ¡Míralo con un grupo pequeño o un mentor para aprender más sobre cómo funcionan verdaderamente los principios que enseña la Biblia!
Cómo funciona la resurrección
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Puntos de conversación:
- La resurrección nos da una esperanza segura y eterna. Efesios 1:18, 1 Corintios 15:19
- No solo somos perdonados; somos la herencia de Dios, Su pueblo preciado. Efesios 1:18, Efesios 2:1-10
- El Espíritu Santo nos empodera diariamente con el mismo poder que resucitó a Jesús. Efesios 1:19-20, Hechos 1:8
¡Feliz Dia de Resurrección! Hoy empezamos una nueva serie titulada “Cómo funcionan las cosas”. Nuestra primera lección de esta serie es “Cómo funciona la resurrección.” No, ¿cómo lo logró Jesús? En cambio, ¿cómo funciona hoy en mi vida? ¿Cómo afecta mi forma de pensar y vivir?
En lo personal, me encanta intentar descubrir cómo funcionan las cosas. De joven no tuve un papá quien me enseñara a cómo patear una pelota, cómo cambiar el aceite del carro ni cómo arreglar una llave que gotee agua. Lo bueno es que ¡ahora solo entro en YouTube! y aprendo a como hacer casi todo.
La idea principal del mensaje de hoy es que la resurrección de Jesús lo cambia todo, no sólo en aquel entonces, sino hoy, en este mismo instante. Seamos realistas por un momento. Algunos de ustedes vienen una o dos veces al año a la iglesia: Navidad y tal vez el Domingo de Resurrección. Y me alegro mucho de que estés aquí. En serio. Hay algo en ti que sabe que esta historia de hoy importa.
Hoy vamos a profundizar en tres versículos importantes de la Biblia: Efesios 1:18,19 y 20. Quiero mostrarles tres cosas que la resurrección hace por nosotros y que realmente cambian las reglas del juego. Empecemos con el primer versículo, el 19:
Efesios 1:18a (NTV) Pido que les inunde de luz el corazón, para que puedan entender la esperanza segura que él ha dado a los que llamó….
Entonces, nuestro primer punto, y lo primero que quiero mostrarles que:
La resurrección nos da esperanza segura.
Vivimos en un mundo falto de esperanza. Malas noticias, sueños rotos, ansiedad, por todas partes. Pero la Resurrección nos recuerda que la muerte no es el final de la historia. Esa tumba vacía dice que Jesús ganó.
Hay dos tipos de esperanza: la temporal y la eterna. Empecemos hablando de la temporal o sea la terrenal. La esperanza temporal es una ilusión ya que no es eterna. La “esperanza segura” del que habla el versículo 19 es más que una ilusión. La esperanza segura es lo cierto e inquebrantable. Es la garantía que Dios cumplirá sus promesas.
Es la garantía del PERDÓN en lugar de condenación. De la PAZ en lugar de ansiedad constante. Y de FORTALEZA en Nuestra Debilidad como dice el apóstol Pablo:
Filipenses 4:13 (NTV) Pues todo lo puedo hacer por medio de Cristo, quien me da las fuerzas.
Este es uno de los versículos más mal citados de todos los tiempos. Tendemos a centrarnos en logros personales o en perseguir sueños, como si Jesús fuera el combustible de nuestras ambiciones propias. Pero leamos el versículo anterior para entender el 13:
Filipenses 4:12 (NTV) Sé vivir con casi nada o con todo lo necesario. He aprendido el secreto de vivir en cualquier situación, sea con el estómago lleno o vacío, con mucho o con poco.
Pablo está hablando de contentamiento: cómo ha aprendido a confiar en Jesús. ya sea rico o pobre, cómodo o sufriendo. Entonces cuando él dice, “Todo lo puedo en Cristo” él no está diciendo, “Puedo ganar en la vida”. Él está diciendo: “Puedo soportar cualquier cosa que la vida me depare, porque Cristo me fortalece”. Eso es mucho Más profundo, un tipo de esperanza más resistente, y está arraigada en el poder de la resurrección que levantó a Jesús de entre los muertos.
Ahora, hablemos del segundo tipo de esperanza, la eterna o sea la esperanza celestial. Esta es la esperanza segura ya que no pasa según nuestras circunstancias. Esta esperanza eterna es la que a nosotros nos anima que podremos tener victoria sobre la muerte algún día.
1 Corintios 15:19 (NTV) Y si nuestra esperanza en Cristo es solo para esta vida, somos los más dignos de lástima de todo el mundo.
Todo el perdón, la paz, la fuerza en esta vida es grande pero de corta duración. 70 años, 80, incluso 100 años no son nada comparados con la eternidad. Nuestra esperanza segura es que así como Jesús derrotó a la muerte, nosotros también lo haremos algún día.
Pasemos a la segunda forma en que la resurrección funciona para nosotros.
Efesios 1:18b (NTV) …—es decir, su pueblo santo—, quienes son su rica y gloriosa herencia.
Algunas traducciones dicen “las riquezas de la gloria de su herencia” (RVC). Hace que parezca que estamos heredando riquezas. Es verdad: las riquezas (justicia) de Jesús nos son acreditadas. Si bien eso es cierto, ese no es el verdadero punto. La NTV dice “su pueblo santo… son… su herencia” ¡Esa es una declaración aún más poderosa! Esa es la segunda cosa que hace la resurrección:
La resurrección nos hace a nosotros la herencia de Dios.
Este es un cambio de estado inimaginable. Antes de la resurrección: Estábamos desesperados, destrozados, bajo una maldición. Éramos “objetos del enojo”.
Efesios 2:1-3 (NTV) Antes ustedes estaban muertos a causa de su desobediencia y sus muchos pecados. 2 Vivían en pecado, igual que el resto de la gente, obedeciendo al diablo—el líder de los poderes del mundo invisible—, quien es el espíritu que actúa en el corazón de los que se niegan a obedecer a Dios. 3 Todos vivíamos así en el pasado, siguiendo los deseos de nuestras pasiones y la inclinación de nuestra naturaleza pecaminosa. Por nuestra propia naturaleza, éramos objeto del enojo de Dios igual que todos los demás.
Después de la resurrección, NOSOTROS somos la riqueza, somos el premio. Deja que eso se asimile en tu corazón. Tú eres el premio de Dios. Tú, roto, arruinado e indigno, eres a quien Él vino. El que Él quiere por toda la eternidad.
Efesios 2:10 (NTV) Pues somos la obra maestra de Dios. Él nos creó de nuevo en Cristo Jesús, a fin de que hagamos las cosas buenas que preparó para nosotros tiempo atrás.
Jesús no resucitó de entre los muertos para crear una festividad religiosa. Se levantó para reclamar lo que es suyo: una relación contigo. Esta es la segunda manera en que la resurrección obra en nosotros: Dios quiere una relación contigo. La muerte de Jesús cancela la deuda que le debemos a Dios.
Esto es bueno, pero todavía nos deja en un lugar neutral. La resurrección va un paso más allá y acredita las riquezas de Jesús a nuestras cuentas. Y luego da otro paso para hacer de nosotros la posesión más preciada de Dios “su pueblo santo—, quienes son su rica y gloriosa herencia.”
Veamos una cosa más de los 3 versículos de Efesios:
Efesios 1:19-20 (NTV) También pido en oración que entiendan la increíble grandeza del poder de Dios para nosotros, los que creemos en él. Es el mismo gran poder 20 que levantó a Cristo de los muertos y lo sentó en el lugar de honor, a la derecha de Dios, en los lugares celestiales.
Entonces, la tercera y última cosa que quiero mostrarles que la resurrección hace:
La resurrección nos empodera para la vida diaria.
Este pasaje dice que es el “mismo gran poder” que obró la resurrección es el que nos empodera a nosotros. ¡Está hablando del Espíritu Santo! Esto lo podemos confirmar en Hechos y en Efesios.
Hechos 1:8 (NTV) pero recibirán poder cuando el Espíritu Santo descienda sobre ustedes;…
Efesios 1:13 (NTV) …Además, cuando creyeron en Cristo, Dios los identificó como suyos al darles el Espíritu Santo, el cual había prometido tiempo atrás.
Ese poder es Dios mismo, la tercera persona de la Trinidad. ¡Vuelve la próxima semana para aprender cómo funciona! Ese mismo Espíritu Santo nos empodera. No por una hazaña única como la resurrección (lo cual es genial) pero para victorias diarias. Victorias como obedecer a tus padres (hijos), amar a tus hijos (padres) y ser una persona generosa (todos). Además, cosas diarias como respondiendo preguntas espirituales, superar la adicción, permanecer fiel a su cónyuge y la lista continúa. Todo eso lo podemos hacer porque Jesús resucitó de entre los muertos.
Más de un par de veces al año se corta la red eléctrica en mi casa. Es tan molesto. Nada funciona. Es un sentimiento bastante impotente. Así es como algunos de ustedes podrían sentirse hoy. No tienen energía, nada parece funcionar. Creo que es hora de recurrir a Jesús. La resurrección de Jesús lo cambia todo, no sólo en aquel entonces, sino hoy mismo, en este instante.
Pero esto sólo es cierto para aquellos que se han vuelto a Jesús con fe. La resurrección no FUNCIONA para ti hasta que hagas esto. Admite que estás destrozado, desesperado, impotente. Confía en la muerte y resurrección de Jesús para darte una esperanza segura, para hacer de TI la herencia de Dios, Su tesoro. También para empoderarte para la vida diaria.
- Lee los puntos de discusión anteriores en grupo, incluidas las citas bíblicas. ¿Cuáles son tus pensamientos iniciales sobre estos puntos?
- ¿Cómo desafía la idea de una “esperanza segura” tu perspectiva actual sobre la fe o las circunstancias?
- ¿Qué significa para ti ser la herencia de Dios? ¿Por qué es una verdad poderosa?
- ¿Puedes pensar en un área de tu vida donde necesites el poder de la resurrección ahora mismo?
- ¿Por qué crees que es importante conectar la resurrección con la vida diaria, no solo con el Domingo de Resurrección?
- ¿Cómo te sentirías al caminar en el poder del Espíritu Santo esta semana?
- ¿Alguna vez has tenido un momento en el que todo te pareció impotente, como un apagón espiritual? ¿Cómo podría Jesús cambiar eso?
Cómo funciona la Trinidad
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Puntos de conversación:
- El Antiguo Testamento insinúa la compleja unidad de Dios con lenguaje plural y figuras divinas. Génesis 1:26, Deuteronomio 6:4, Salmos 110:1
- Los cristianos no inventaron la Trinidad; la descubrieron al reunir todas las enseñanzas de la Biblia. Las teorías conspirativas sobre la Trinidad son como teorías de la Tierra plana: fácilmente descartables con una lectura honesta de la Biblia.
- Las descripciones menores de Dios no funcionan bíblicamente; contradicen enseñanzas claras sobre la unicidad de Dios, la divinidad de Jesús y la persona del Espíritu Santo. Deuteronomio 6:4, Isaías 44:6, Romanos 3:29-30, Juan 1:1, Colosenses 2:9, Hechos 5:3-4
- La Trinidad explica a Dios como un solo ser en tres personas, una verdad profunda que moldea la fe y la adoración cristianas. 1 Pedro 1:2
Hoy vamos a abordar uno de los temas más debatidos y difíciles de entender del cristianismo: la Trinidad. ¿Está la Trinidad verdaderamente en la Biblia o lo inventaron los cristianos? ¿Existen otras opciones o es realmente la única manera de creer en Dios? ¿Cuál es la mejor manera de entender y explicar la doctrina? Llegaremos a esas preguntas, pero quiero comenzar con un experimento mental.
Imagínate vivir en un mundo bidimensional (de dos dimensiones), [ver Planilandia por Edwin A. Abbott (1884)], tratando de entender una esfera (algo redondo como una pelota perfectamente redonda). Es un objeto tridimensional donde todos los puntos de la superficie están a la misma distancia del centro. En dos dimensiones sólo se verían puntos y líneas (x, y). No tienes concepto de esfera (z). No hay manera de verlo en tu mundo.
Esto es lo mejor que puedes hacer: haz que la pelota se cruce con tu plano bidimensional. Piensa en cómo se vería eso: primero, un solo punto. Luego, una serie de círculos crecientes. Después, esos círculos comienzan a reducirse. Por último, un solo punto otra vez. Luego desaparece.
Es imposible entender completamente una esfera si vivieras en un plano de dos dimensiones. Porque, ¿cómo entenderías algo que existe en tres dimensiones en un plano de dos dimensiones solamente? Algo así es la Trinidad. Entonces empecemos para poder explicártelo. Lo primero que debes entender sobre este tema es que:
La Trinidad es un concepto cristiano que intenta explicar un Dios inexplicable.
Dios es el creador del universo y completamente diferente a todos nosotros. En este mundo, nunca entenderemos completamente cómo es él. Nosotros somos humanos, Dios no lo es. Somos criaturas, Dios es Creador. Somos finitos, Dios es infinito. C.S. Lewis escribió: “Si usas solo tus sentidos para entender a Dios, es como usar solo tus dedos para entender la música”.
Así es con el ejemplo de la esfera si vivieras en dos dimensiones. En ese plano bidimensional se podría decir: “una esfera es una serie de puntos y círculos”. Es un buen esfuerzo y es cierto desde tu perspectiva. Pero se pierde la imagen más completa, que es una forma redonda y completa con volumen. Este es el problema de entender a Dios. Pero es NUESTRO problema, no el de Dios. Somos nosotros los que vivimos en dos dimensiones.
1 Corintios 13:12 (NTV) Ahora vemos todo de manera imperfecta, como reflejos desconcertantes, pero luego veremos todo con perfecta claridad. …
Entonces Dios “se cruza” con nuestro mundo al darnos la Biblia: en ella obtenemos indicios de la naturaleza de Dios. Como un rompecabezas, necesitamos armarlo todo. A continuación se muestran algunos ejemplos:
Génesis 1:26 (NTV) Entonces Dios dijo: «Hagamos a los seres humanos a nuestra imagen, para que sean como nosotros.…”
Te doy la explicación: Elohim (אֱלֹהִים) es gramaticalmente plural, pero a menudo requiere verbos en singular cuando se refiere al único Dios verdadero en la Biblia hebrea. Pero la palabra “Hagamos” es un verbo plural (es mejor.), coincidiendo con los pronombres plurales “nuestra imagen” y “nuestra semejanza”. ¿De qué se trata esto? ¿Por qué hay un “nosotros” cuando se trata de Dios?” Si en Deuteronomio leemos:
Deuteronomio 6:4 (RVC) »Oye, Israel: el Señor nuestro Dios, el Señor es uno.
Conocida como el Shemá, esta es la declaración central de la religión judía; el monoteísmo. Este es el corazón del judaísmo: el único Dios que los redimió de Egipto, que hizo un pacto con ellos. En el contexto del Antiguo Testamento, esta enseñanza de “un solo Dios” a menudo se daba como una advertencia al pueblo para que no siguiera a otros dioses de las naciones que los rodeaban.
Pero espera: “Dios” = Elohim es gramaticalmente plural en hebreo. Literalmente podría traducirse “dioses”, pero se usa consistentemente en la Biblia con verbos y adjetivos singulares cuando se refiere al único Dios verdadero de Israel. Esto es un indicio lingüístico temprano de la Trinidad.
Salmos 110:1 (NTV) El Señor le dijo a mi Señor: «Siéntate en el lugar de honor a mi derecha, hasta que humille a tus enemigos y los ponga por debajo de tus pies»
David escucha a YHWH hablándole al futuro Mesías quien sería descendiente de David. Sin embargo, David lo llama “mi Señor” ¡¿Él es MÁS GRANDE que David?! Esta figura es a la vez Rey Divino y Sacerdote eterno. Jesús explica esto en Mt 22:45.
El Salmos 110 es citado en el Nuevo Testamento más que cualquier otro capítulo del Antiguo Testamento y apunta a una verdad misteriosa sobre la naturaleza de Jesús. Génesis 1:26, Deuteronomio 6:4 y Salmos 110:1 nos dan un hilo poderoso a través del Antiguo Testamento que insinúa el concepto que explica un Dios inexplicable: la Trinidad.
Si bien la Trinidad no está completamente detallada en el Antiguo Testamento, hay momentos misteriosos en los que Dios es retratado en términos plurales y habla de los demás como divinos, sentando las bases para lo que se hace explícito en el Nuevo Testamento.
Pensemos en algunos ejemplos de la historia. Primero, considera a Copérnico en 1543. Descubrió que la Tierra orbita alrededor del sol. Iba en contra de la sabiduría predominante de la época. En ese entonces, solo era aceptado el modelo geocéntrico: la creencia de que la Tierra era el centro del universo y que todo, incluido el sol, giraba alrededor de ella.
Esta visión no había sido cuestionada durante más de mil años. Parecía obvio: el sol parecía moverse por el cielo y la Tierra no parecía moverse. Pero Copérnico era más inteligente que todos los demás. Él cuestionó esto con el modelo heliocéntrico, mostrando que la Tierra orbita alrededor del sol, una idea que reorientó radicalmente la comprensión humana y se alineó más estrechamente con la realidad observable. Él prestó atención a cómo Dios hizo el mundo. Él no inventó la verdad; descubrió lo que Dios había construido en la creación.
También considera a Newton en 1687. Él descubrió la ley de la gravedad. Era un principio que siempre fue cierto, pero nadie tenía una palabra para describirlo. Newton dijo lo siguiente en Principios Matemáticos: “Todavía no he podido descubrir la causa de estas propiedades de la gravedad a partir de los fenómenos y no formulo ninguna hipótesis… Basta con que la gravedad exista realmente y actúe según las leyes que hemos explicado.” Newton no inventó la gravedad; la observó y le puso un nombre. Estos hombres, por brillantes que fueran, no inventaron estos conceptos. Los descubrieron. Del mismo modo:
Los cristianos no inventaron la doctrina de la Trinidad; ellos lo descubrieron en la Biblia.
La palabra Trinidad no está en la Biblia, pero eso no significa que la doctrina sea una construcción humana. Los estudiantes de la Biblia a lo largo de la historia han descubierto esta verdad. No sólo los primeros concilios (como Nicea y Constantinopla) pero incluso los cristianos de hoy. Tienes que leer la Biblia por ti mismo y observar sus declaraciones. Júntalo todo y saca tus propias conclusiones. Lo que descubrirás es que sólo hay una opción: la Trinidad
Ahora bien, existen “teorías de conspiración” por ahí, como que la Trinidad fue inventada por el Imperio Romano. Otra conspiración es que los Caballeros Templarios crearon la Trinidad para el control político o que la Trinidad fue añadida por traductores de la Biblia. Todas estas teorías conspiracionales me recuerdan a los “terraplanistas”.
Los terraplanistas creen que la Tierra es plana y estacionaria: no gira ni orbita nada. El sol y la luna están sobre la Tierra en un patrón circular, como si fueran focos. Para ellos, la gravedad no existe; la Tierra plana simplemente acelera constantemente hacia arriba a 9,8 m/s². Además, creen que los viajes espaciales son falsos incluidos los alunizajes; o sea que creen que nunca se llegó ni se aterrizó en la luna. Afirman que la NASA es parte de una conspiración global y ¡los astronautas son actores!
Sin ofender a los terraplanistas, pero así es como yo veo la Trinidad. No te emborraches con canales de YouTube incompletos para obtener su información. Te verás absorbido por algunas cosas bastante excéntricas. Sólo haz esto: lee tu Biblia y usa tu cabeza. Llegarás a la misma conclusión que yo: los cristianos no inventaron la doctrina de la Trinidad; ellos la descubrieron en la Biblia.
Es como el descubrimiento de los gérmenes. Louis Pasteur descubrió los gérmenes en la década de 1860. Esto es super interesante porque antes de la teoría de los gérmenes, el “humorismo” era aceptado. El humorismo era el sistema de creencias médicas dominante en el mundo occidental desde la antigua Grecia hasta el siglo XVIII.
Según esta teoría, tu cuerpo contenía cuatro fluidos básicos, o humores, y tu salud dependía de mantenerlos en perfecto equilibrio. Primero estaba el humor de la sangre, asociada con la alegría y la vitalidad. El segundo humor era la bilis amarilla: asociada con la ira y la agresión. El tercer humor era la bilis negra: asociada con la tristeza y la melancolía. Por último, estaba el humor de la flema que era asociada con la calma y la lentitud.
Si estuvieras enfermo, los médicos no buscarían bacterias o virus. Asumirían que tu humor estaba fuera de control. Así surgió el tratamiento llamado “Flebotomía” o sea drenar intencionalmente la sangre de una persona para tratar o prevenir una enfermedad. Un dato curioso: ¡los postes de barbero (rayas rojas y blancas) en realidad simbolizan el derramamiento de sangre! Rojo = sangre, Blanco = vendas. En la Europa medieval, los barberos era la gente a la que acudían para sangrías y cirugías menores.
La víctima más famosa de este procedimiento tan peligroso fue George Washington. Sangró con más de 3,75 litros drenados durante una infección de garganta. Murió poco después. Esta es una gran ironía porque Hipócrates (c. 460-370 a. C.) popularizó la idea de que el cuerpo contenía cuatro humores (fluidos) y de allí surgió el procedimiento de la sangría para sanar. El juramento hipocrático dice: “Primero, no hacer daño”. Más era lo que más sucedió con la sangría. En pocas palabras: el humorismo no sólo estaba mal; no funcionaba y peor aún, ¡era perjudicial! Lo mismo puede decirse de ciertas ideas sobre la naturaleza de Dios.
Según la Biblia, las descripciones menores de Dios simplemente no funcionan.
No podemos decir que hay más de un Dios. La Biblia enseña claramente el monoteísmo. Mira los siguiente tres versículos al respecto:
Deuteronomio 6:4 (RVC) »Oye, Israel: el Señor nuestro Dios, el Señor es uno.
Isaías 44:6 (NTV) Esto dice el Señor, el Rey y Redentor de Israel, el Señor de los Ejércitos Celestiales: «Yo soy el Primero y el Último; no hay otro Dios.
Romanos 3:30 (NTV) Hay solo un Dios, y él hace justas a las personas—tanto a los judíos como a los gentiles— únicamente por medio de la fe.
No podemos decir que Jesús no es Dios. La Biblia enseña claramente que Jesús es plenamente divino.
Juan 1:1 (NTV) En el principio la Palabra ya existía. La Palabra estaba con Dios, y la Palabra era Dios.
Colosenses 2:9 (NTV) Pues en Cristo habita toda la plenitud de Dios en un cuerpo humano.
Filipenses 2:6 (NTV) Aunque era Dios, no consideró que el ser igual a Dios fuera algo a lo cual aferrarse.
No podemos decir que el Espíritu Santo no es Dios. La Biblia enseña claramente que el ES es completamente divino.
Hechos 5:3-4 (NTV) Entonces Pedro le dijo: «…Le mentiste al Espíritu Santo y te quedaste con una parte del dinero. … ¿Cómo pudiste hacer algo así? ¡No nos mentiste a nosotros sino a Dios!».
Mateo 28:19 (NTV) Por lo tanto, vayan y hagan discípulos de todas las naciones, bautizándolos en el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo.
El Espíritu figura igualmente con el Padre y el Hijo, lo que implica coigualdad y codivinidad. Ver 2 Corintios 13:14, 1 Pedro 1:2, Efesios 4:4–6, Judas 1:20–21, Juan 14:16–17, Juan 14:26, Juan 15:26, Juan 16:13–15. En ninguna parte de la Biblia se trata al Espíritu como inferior o como “sólo una fuerza”; se le trata como algo completamente divino y personal. Al igual que la práctica de la sangría en la época medieval, estas ideas simplemente no “funcionan”. No tienen sentido lógico si tomas en serio la Biblia y la lógica en sí.
Entonces, ¿qué funciona, bíblicamente hablando? Ahí es donde entra en juego el concepto de la Trinidad. (¡Por fin!)
La doctrina de la Trinidad dice esto: Dios es un ser en tres personas.
Fácil de decir, pero difícil de entender. Una paradoja, no una contradicción, o sea dos cosas que son ciertas al mismo tiempo, aunque te dejen boquiabierto.
Parte 1: Hay un Dios en esencia.
Ya hemos cubierto esto. No se puede ser un cristiano bíblico sin él. Usamos el término “ser” o “esencia” para describir la unidad de Dios. No hay dos Dioses ni tres Dioses ni muchos Dioses. Es un solo Dios en existencia.
Parte 2: Dios existe eternamente como tres personas.
Esta es la parte complicada para la mayoría de nosotros. El lenguaje de “personas” puede no parecer preciso. Históricamente, esa palabra fue elegida porque las personas interactúan. Nos ayuda a mantener una distinción vital. Es importante señalar en nuestra definición: “Hay un Dios que existe eternamente en tres personas”.
En otras palabras es eterno. No comenzó simplemente con el nacimiento de Jesús. Antes de que Jesús naciera, existió como Dios desde la eternidad pasada. La Biblia lo llama “la Palabra” o “el Verbo”. La personalidad implica que podemos relacionarnos personalmente con cada miembro de la Trinidad a medida que descubrimos sus roles únicos. Un ejemplo de esto, es la salvación. En la salvación nos podemos relacionar con el Padre, con el Hijo, y con el Espíritu SAnto.
1 Pedro 1:2 (NTV) Dios Padre los conocía y los eligió desde hace mucho tiempo, y su Espíritu los ha hecho santos. Como resultado, ustedes lo obedecieron y fueron limpiados por la sangre de Jesucristo. …
El padre inició la salvación. El Hijo murió en la cruz para lograrlo. El Espíritu produce el fruto de la salvación en las personas.
Así es como funciona la Trinidad: Es un concepto que intenta explicar un Dios inexplicable. Los cristianos no inventaron la doctrina; lo descubrieron en la Biblia porque, según la Biblia, las descripciones menores de Dios simplemente no funcionan. Dios es un ser en tres personas. Más que una verdad intelectual, es personal.
- Lee los puntos de discusión anteriores en grupo, incluidas las citas bíblicas. ¿Cuáles son tus pensamientos iniciales sobre estos puntos?
- En tus propias palabras, explica la analogía bidimensional de esta lección. ¿Cómo ilustra nuestra incapacidad para comprender a Dios?
- Haz una lista de algunos grupos que niegan la Trinidad. ¿Por qué crees que se oponen con tanta fuerza a una visión trinitaria de Dios?
- ¿Por qué crees que es importante que los cristianos tengan una visión precisa de la naturaleza de Dios? ¿Qué peligros ves en seguir visiones “inferiores” o inexactas de Dios?
- ¿Cómo profundiza la enseñanza bíblica sobre el Padre, el Hijo y el Espíritu en tu relación personal con Dios?
- ¿Cómo explicarías la Trinidad a alguien escéptico o confundido al respecto?
Las personas tóxicas
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Puntos de conversación:
- Las personas tóxicas se dejan llevar por la inseguridad. Saúl no soportó el éxito de David. Sus celos revelaron un profundo temor interno a ser reemplazado. 1 Samuel 18:6-9
- El enemigo usa a las personas tóxicas. Debido a que Saúl rechazó la autoridad de Dios, se expuso al tormento espiritual. 1 Samuel 19:9-10. Romanos 1:28. 1 Timoteo 1:19-20
- Las personas tóxicas se creen sus propias mentiras. Saúl manipuló los hechos para hacerse la víctima y vilipendiar a David. 1 Samuel 22:7-8. Juan 8:44
- Las personas tóxicas se destruyen a sí mismas y, a veces, a quienes las rodean. La vida de Saúl terminó en tragedia, llevándose consigo a sus hijos y compañeros cercanos. 1 Samuel 31:1-6
- La respuesta de David a Saúl nos da dos maneras saludables de lidiar con las personas tóxicas:
- No te vengues. Confía en Dios con justicia. 1 Samuel 26:23-24. Romanos 12:18
- Aprende a alejarte. A veces, lo más saludable que puedes hacer es poner un límite y huir. 1 Samuel 19:10. 1 Samuel 27:1. 2 Timoteo 4:14-15
¿Alguna vez te has encontrado caminando con pies de plomo con alguien? o como se dice en inglés “caminando sobre cáscaras de huevos”. ¿Alguna vez te has preguntado por qué una relación que comenzó con tantas promesas poco a poco se convirtió en una fuente de estrés, confusión o incluso miedo? A veces esta persona empieza siendo tu mayor apoyo y termina siendo tu peor enemigo. Es posible que un día te elogie y al día siguiente te menosprecie. Podría pretender fortalecerte mientras conspira en secreto para derribarte. Si alguna vez has experimentado este tipo de relación, no estás solo.
Hoy nos sumergimos en la historia de una de las figuras más trágicas de la Biblia: el rey Saúl. Saúl fue el primer rey de Israel. Fue ungido por Dios, elegido por el pueblo y lleno de potencial. Pero en lugar de liderar con humildad y fe, Saúl se convirtió en un líder tóxico cuya vida estaba impulsada por los celos, el miedo, la manipulación y la obsesión, especialmente hacia un joven llamado David.
Al estudiar el comportamiento tóxico de Saúl, descubriremos cómo funcionan las personas tóxicas: qué los impulsa, cómo manipulan y por qué a menudo se autodestruyen. Lo más importante, cómo nosotros, como seguidores de Cristo, podemos reconocerlo, responder sabiamente y proteger nuestro corazón.
Hoy vamos a ver 4 características de una persona tóxica. Estos no son los únicos rasgos de una persona tóxica. Y no todas las personas tóxicas cumplen todos estos requisitos. Tal vez solo uno o dos pero eso es suficiente para volverlos tóxicos. ¡El rey Saúl las tuvo todas! Es un personaje con un final trágico.
A medida que avanzamos en la historia, haz dos cosas: primero, considera si la persona tóxica que conoces marca las casillas. Segundo, considera si TÚ marcas la casilla o casillas porque la verdad es que todos somos un poco tóxicos. Quizás Dios te abra los ojos a tus propias luchas. Al final, te mostraré la respuesta correcta ante una persona tóxica y quizás tengas que ponerla en práctica.
4 características de una persona tóxica:
- Las personas tóxicas se dejan llevar por la inseguridad.
¿Alguna vez has conocido a alguien así? No siempre es obvio. A veces esta cualidad negativa está debajo de la superficie. He notado que incluso pueden ser personas que lo tienen todo bajo control. Todo luce perfecto en sus perfiles sociales para comprender cómo funcionan las personas tóxicas (y cómo manejarlas), debemos comprender qué es lo que les motiva o les mueve. Saúl es un buen ejemplo.
1 Samuel 18:6-9 (NTV) Cuando el ejército de Israel regresaba triunfante después que David mató al filisteo, mujeres de todas las ciudades de Israel salieron para recibir al rey Saúl. Cantaron y danzaron de alegría con panderetas y címbalos. 7 Este era su canto: «Saúl mató a sus miles, ¡y David, a sus diez miles!». 8 Esto hizo que Saúl se enojara mucho. «¿Qué es esto?—dijo—. Le dan crédito a David por diez miles y a mí solamente por miles. ¡Solo falta que lo hagan su rey!». 9 Desde ese momento Saúl miró con recelo a David.
La inseguridad puede hacer que una persona tóxica busque atención constante o validación externa. Como no se sienten suficientes por sí mismas, dependen de la aprobación de los demás, y cuando no la reciben, pueden reaccionar de manera dramática, controladora, manipuladora o incluso destructiva.
También pueden actuar de manera agresiva o crítica, no porque realmente crean que los demás son inferiores, sino porque necesitan derribar a otros para sentirse mejor consigo mismas. Eso es lo que le pasó al rey Saúl. No soporto que las personas admiraran y alabaran a David poniéndolo a él por debajo de este jovencito. Su inseguridad lo llevó a detestar a David hasta el punto de querer verlo muerto. Saúl, en lugar de enfrentar sus propios miedos y fragilidades, culpa y ataca a David.
Esto es muy típico de las personas tóxicas.En vez de reconocer su inseguridad ataca a otros como una forma de distraerse de sus propias debilidades y miedos. En resumen, la inseguridad no siempre hace a alguien tóxico, pero cuando una persona permite que sus miedos dominen sus acciones sin reflexionar, puede terminar afectando negativamente a quienes la rodean.
- Las personas tóxicas son usadas por el enemigo.
No digo esto para señalar con el dedo sino para quitar el telón, para ayudarte a comprender que puede haber más de lo que crees detrás de un comportamiento tóxico. Esta puede ser una forma de guerra espiritual. Jesús quiere relaciones completas y saludables. El enemigo quiere lo contrario. Jesús obra en las personas sanas. Satanás está trabajando en las personas tóxicas como se ve claramente en Saúl.
1 Samuel 19:9-10 (NTV) Pero cierto día, cuando Saúl estaba sentado en su casa con una lanza en la mano, de repente el espíritu atormentador de parte del Señor vino sobre él como antes. Mientras David tocaba el arpa, 10 Saúl le arrojó su lanza, pero David la esquivó y, dejando la lanza clavada en la pared, huyó y escapó en medio de la noche.
¿Qué significa esto del “espíritu atormentador de parte del Señor”? En 1 Samuel 15 se lee que Saúl ya había rechazado la autoridad de Dios. Debido a la obstinada rebelión de Saúl, Dios le quitó Su Espíritu de bendición y protección (1 Samuel 16:14) y permitió que un espíritu atormentador (tal vez una fuerza demoníaca) influyera en él. Era una forma de disciplina o juicio, no que Dios fuera malo. Esto no solo lo vemos en el A.T. sino que también se ve en el N.T.
Romanos 1:28 (NTV) Por pensar que era una tontería reconocer a Dios, él los abandonó a sus tontos razonamientos y dejó que hicieran cosas que jamás deberían hacerse.
1 Timoteo 1:19-20 (NTV) Aférrate a tu fe en Cristo y mantén limpia tu conciencia. Pues algunas personas desobedecieron a propósito lo que les dictaba su conciencia y, como resultado, su fe naufragó. 20 Himeneo y Alejandro son dos ejemplos. Yo los expulsé y se los entregué a Satanás, para que aprendieran a no blasfemar contra Dios.
Lo de “entregarlos a Satanás” no significa literalmente que Pablo los entregó físicamente a Satanás, sino que se refiere a la disciplina espiritual dentro de la comunidad cristiana. En algunos casos, esto podría significar apartar a alguien de la comunidad para que, al experimentar las consecuencias de su conducta fuera del pueblo de Dios, pueda reflexionar y arrepentirse.
En el caso de Saúl, la Biblia menciona que “el espíritu atormentador de parte del Señor” vino sobre él después de que Dios lo rechazó como rey debido a su desobediencia (1 Samuel 16:14). Esto no significa que Dios le envió un espíritu maligno sin razón, sino que permitió que Saúl experimentara angustia y perturbación como consecuencia de su alejamiento de Dios. La falta de su comunión con el Espíritu de Dios lo dejó vulnerable a la desesperación, la ira y la paranoia. Este espíritu despertó en Saúl temor, celos, depresión e ira. En lugar de volverse a Dios arrepentido, Saúl se hundió más profundamente en la locura y la violencia.
- Las personas tóxicas empiezan a creer sus propias mentiras.
A veces, las personas tóxicas se mienten tanto a sí mismas que terminan creyendo sus propias mentiras. Al principio, pueden saber que no están diciendo la verdad, pero con el tiempo, repiten sus engaños tantas veces que los aceptan como realidad.
¿Por qué pasa esto? Porque admitir que han mentido significaría reconocer sus errores, y eso sería incómodo. En lugar de aceptar la verdad, prefieren justificar su mal comportamiento para no sentirse culpables.
Cuando alguien empieza a creer sus propias mentiras, pasa lo siguiente: Siempre se ven como la víctima y nunca aceptan responsabilidad por sus acciones. Inventan historias para manipular a los demás y hacer que todo parezca estar a su favor. Se rodean de gente que les cree sin cuestionar o que no quiere confrontarlos. Si alguien los enfrenta con la verdad, se enojan o dicen que los están atacando.
Es como si construyeran su propio mundo de fantasía, donde ellos son los héroes y todos los demás son los malos. Esto puede ser peligroso, porque si una persona tóxica te arrastra a su versión falsa de la realidad, podrías empezar a dudar de ti mismo o sentirte culpable por cosas que no hiciste. Mira como se ve este rasgo en Saúl:
1 Samuel 22:7-8 (NTV) —¡Escuchen bien, hombres de Benjamín!—les gritó Saúl a sus oficiales al oír las noticias—. ¿Acaso ese hijo de Isaí les ha prometido a cada uno de ustedes campos y viñedos? ¿Les ha prometido a todos hacerlos generales y capitanes de su ejército? 8 ¿Es por eso que han conspirado contra mí? Pues ninguno de ustedes me avisó cuando mi propio hijo hizo un pacto solemne con ese hijo de Isaí. Ni siquiera sienten lástima por mí. ¡Imagínense! ¡Mi propio hijo incita al hijo de Isaí para que me mate, tal como está tratando de hacer hoy mismo!
Este pasaje de la Biblia muestra cómo el rey Saúl se dejó llevar por su inseguridad y paranoia, hasta el punto de creer sus propias mentiras. En lugar de aceptar que Dios había escogido a David como futuro rey, Saúl se convenció de que todos estaban conspirando contra él, incluyendo su propio hijo, Jonatán.
Mira cómo actúa: primero, se hace la víctima. Saúl dice: “Ni siquiera sienten lástima por mí”. Está manipulando a los demás para que se sientan culpables por no apoyarlo. Muchas personas tóxicas usan esta táctica para controlar a quienes las rodean. Después, distorsiona la verdad. Afirma que David quiere matarlo, cuando en realidad, David estaba tratando de evitar el conflicto y es él quien quiere matarlo. Saúl presenta la historia de manera exagerada para que todos crean que él es el héroe y David el villano. Por último, miente sobre los motivos de los demás. Insinúa que David les ha prometido riquezas y posiciones de poder, cuando en realidad es Saúl quien ha usado estas cosas para manipular a su gente.
Este es un claro ejemplo de cómo una persona tóxica puede convencerse de que su versión de la historia es la única verdadera, aunque los hechos digan lo contrario. Saúl se obsesiona con esta mentira y empieza a actuar basándose en ella, lo que lo lleva a tomar malas decisiones.
Es importante aprender a identificar estas actitudes en las personas que nos rodean. Cuando alguien manipula, distorsiona la realidad o usa el sentimiento de culpa para controlar a otros, es señal de que puede estar atrapado en su propio engaño. Saber esto nos ayuda a protegernos y evitar caer en su juego.
- Las personas tóxicas se destruyen a sí mismas.
1 Samuel 31:1-6 (NTV) Ahora bien, los filisteos atacaron a Israel, y los hombres de Israel huyeron ante ellos. Mataron a muchos en las laderas del monte Gilboa. 2 Los filisteos cercaron a Saúl y a sus hijos, y mataron a tres de ellos: Jonatán, Abinadab y Malquisúa. 3 La batalla se intensificó cerca de Saúl, y los arqueros filisteos lo alcanzaron y lo hirieron gravemente. 4 Con gemidos, Saúl le dijo a su escudero: «Toma tu espada y mátame antes de que estos filisteos paganos lleguen para atravesarme, burlarse de mí y torturarme». Pero su escudero tenía miedo y no quiso hacerlo. Entonces Saúl tomó su propia espada y se echó sobre ella. 5 Cuando su escudero vio que Saúl estaba muerto, se echó sobre su propia espada y murió junto al rey. 6 Así que Saúl, sus tres hijos, su escudero y sus tropas murieron juntos en ese mismo día.
El rey Saúl es un ejemplo de cómo las personas tóxicas pueden destruirse a sí mismas con el tiempo. En vez de cambiar, Saúl pasó años tomando malas decisiones y dejando que sus celos, miedo y obsesión con David lo dominaran. Esto lo llevó a perder todo: su familia, su reino y su propia vida.
En este pasaje vemos como los filisteos atacan a Israel, y Saúl se encuentra atrapado en una gran derrota. Los guerreros y sus hijos mueren en batalla, y él, gravemente herido, decide quitarse la vida para evitar ser capturado. Saúl se destruye a sí mismo, primero, ignorando las advertencias de Dios. Saúl tuvo muchas oportunidades de corregir su camino, pero decidió seguir igual. Su desobediencia lo dejó vulnerable.
Segundo, se dejó dominar por el miedo y los celos. En lugar de ser un buen líder, pasó demasiado tiempo obsesionado con destruir a David, lo que lo debilitó y lo hizo perder el respeto de su pueblo. Por último, tomó decisiones impulsivas. Como no confiaba en Dios ni en los demás, sus acciones fueron cada vez más destructivas, terminando en el suicido.
Las personas tóxicas pueden lastimar a otros, pero al final, terminan dañándose a sí mismas. Si alguien vive atrapado en la envidia, el resentimiento y la manipulación, con el tiempo perderá lo más importante: su paz, sus relaciones y su propósito. El caso de Saúl es una advertencia de lo que sucede cuando una persona se niega a cambiar y sigue un camino destructivo.
Entonces, ya que hemos visto 4 características de una persona tóxica, pasaremos a ver 2 aspectos clave de la respuesta de David ante la toxicidad de Saúl. De estos dos aspectos aprenderás a cómo responder correctamente ante una persona tóxica.
Cómo responder a las personas tóxicas: 1. No te vengues.
El pasaje que leeremos a continuación refleja el corazón de David y su profundo respeto por Dios y su autoridad. David habla directamente a Saúl después de haber tenido la oportunidad de matarlo, pero decidió no hacerlo.
1 Samuel 26:23-24 (NTV) El Señor da su propia recompensa por hacer el bien y por ser leal, y yo rehusé matarlo, aun cuando el Señor lo puso en mi poder, porque usted es el ungido del Señor. 24 Ahora que el Señor valore mi vida, así como hoy yo he valorado la suya. Que él me rescate de todas mis dificultades.
David tuvo dos oportunidades para tomar el camino fácil y eliminar la amenaza. Se negó a hacerlo en ambos casos y eligió confiar en Dios en lugar de tomar justicia por su propia mano. Aunque Saúl lo perseguía injustamente, David respetó que era el rey ungido y dejó que Dios decidiera su destino. No se vengó de él matándolo, aunque tuvo la oportunidad de hacerlo. En vez de vengarnos, la Biblia nos enseña que debemos vivir en paz:
Romanos 12:18 (NTV) Hagan todo lo posible por vivir en paz con todos.
Como cristianos, somos llamados a vivir en paz con todos, aun con las personas tóxicas. ¡Esto también incluye orar por ellos! La venganza nunca es buena, pero si, a veces tendrás que alejarte de las personas tóxicas por tu salud mental y emocional.
Cómo responder a las personas tóxicas: 2. Aprende a alejarte.
A veces sólo necesitas alejarte o huir como hizo David. En su libro Cuándo alejarse (When to Walk Away), Gary Thomas escribe: “Alejarse no es un fracaso; es un acto de fe. A veces, la acción más cristiana es saber cuándo alejarse.”
¡Jesús también lo hizo! Con los fariseos y con quienes rechazaron su mensaje. No intentes complacerlos. Las personas que buscan complacer a los demás son presa fácil de las personas tóxicas. No seas así. No intentes arreglarlos ya que no es tu trabajo. No intentes controlarlos porque si te esfuerzas demasiado, podrías ser TÚ el tóxico.
No hagas ninguna de esas cosas sino que alejate. David tomó la decisión más importante: huyó de Saúl.
1 Samuel 19:10 (NTV) Saúl le arrojó su lanza, pero David la esquivó y, dejando la lanza clavada en la pared, huyó y escapó en medio de la noche.
¡Huyó por nueve capítulos!
1 Samuel 27:1 (NTV) Pero David seguía pensando: «Algún día Saúl me va a atrapar. Lo mejor que puedo hacer es escapar y vivir entre los filisteos. Entonces Saúl dejará de buscarme en el territorio israelita, y por fin estaré a salvo».
Otro nombre para esto que hizo David es establecer límites. Establecer límites con una persona tóxica es una decisión importante para proteger tu bienestar emocional y mental. Pablo enseña lo mismo en el A.T.:
2 Timoteo 4:14-15 (NTV) Alejandro—el que trabaja el cobre—me hizo mucho daño, pero el Señor lo juzgará por lo que ha hecho. 15 Cuídate de él, porque se opuso firmemente a todo lo que dijimos.
Este versículo refleja la importancia de reconocer cuando alguien actúa de manera perjudicial y tomar medidas para protegerse. Pablo advierte sobre Alejandro, quien le causó daño y se opuso a su mensaje, y aconseja a otros que se cuiden de él. Pablo prácticamente está diciendo que hay que establecer límites con personas tóxicas reconociendo el daño que pueden causar, evitar confrontaciones innecesarias y confiar en que la justicia divina se encargará de las consecuencias.
Así como Pablo no busca venganza, sino que deja el juicio en manos de Dios, establecer límites con personas tóxicas no significa actuar con resentimiento, sino protegerse con sabiduría.
A veces, las personas con actitudes dañinas pueden sobrepasar los límites personales, causando estrés y desgaste emocional. Poner límites saludables implica comunicar de manera clara qué comportamientos no tolerarás. Actúa con firmeza cuando esos límites sean desafiados. Se claro y directo expresando tus límites sin justificarte demasiado. No caigas en provocaciones así que evita entrar en discusiones innecesarias. Sobre todo, prioriza tu bienestar y no sientas culpa por alejarte si es necesario.
Y si después de escuchar este mensaje, te das cuenta de que tú eres el o la tóxica, lo importante es reconocerlo, pedirle perdón a Dios por tu pecado y trabajar en cambiar. Reflexiona y piensa en cómo afectan tus acciones a los demás. Ora y pídele a Dios que te ayude a identificar la causa. A veces la inseguridad o experiencias pasadas te hacen actuar de manera tóxica. Busca apoyo. Habla con alguien maduro en la fe, alguien de confianza o un profesional para dejar de ser tóxico. No sea que termines como Saúl.
- Lee los puntos de discusión anteriores en grupo, incluidas las citas bíblicas. ¿Cuáles son tus pensamientos iniciales sobre estos puntos?¿Qué rasgos tóxicos te llamaron más la atención y por qué? ¿Los has visto en alguien que conoces?
- ¿Cómo se manifiesta la inseguridad en la vida de alguien, incluso cuando no es evidente
- ¿Cómo puedes discernir cuándo el comportamiento tóxico es de naturaleza espiritual en lugar de solamente emocional o psicológica.
- La toxicidad de Saúl no sólo lo afectó a él mismo, sino también a su familia y a su reino. ¿Cómo podemos evitar que los patrones tóxicos infecten a quienes nos rodean?
- ¿Cómo se siente alejarse de una persona tóxica de una manera cristiana?
- ¿Te cuesta querer arreglar, controlar o complacer a las personas tóxicas? ¿A qué crees que se debe?
- ¿Qué límites podrías necesitar establecer en tu vida ahora mismo?
Las familias saludables
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Puntos de conversación:
- La Biblia está llena de familias con problemas. Desde Caín y Abel hasta David y Absalón, Dios obró a través de familias rotas para cumplir sus propósitos. Eso nos da esperanza: Dios no busca la perfección, solo la confianza. Tu familia no se define por tu pasado. No importa de dónde vengas, Dios puede traer sanidad y transformación. Confiar en Él en medio de las dificultades es el primer paso para construir algo mejor.
- Las familias saludables se centran en Jesús. Cada familia se centra en algo: los deportes, la escuela, el dinero o la comodidad. Pero cuando Jesús está en el centro, la Biblia se convierte en el manual y el Espíritu Santo en la fuente de poder. Esto se refleja en cómo una familia invierte su tiempo, dinero y conversaciones. Deuteronomio 6:4-9
- Las familias sanas incluyen esposos y esposas que eligen el amor. El amor no es solo un sentimiento, es una decisión arraigada en un pacto. Las parejas modelan estabilidad cuando se mantienen unidas y reflejan el amor abnegado de Cristo por la Iglesia. Efesios 5:25-26
- Las familias sanas son lideradas por padres que transfieren la responsabilidad. La buena crianza implica ceder gradualmente el control para que los hijos aprendan responsabilidad. En lugar de controlar o descuidar, los padres sabios entrenan, equipan y empoderan a sus hijos para que se conviertan en adultos. Proverbios 22:6
¡Feliz Día de la Madre! Hoy celebramos a las increíbles mujeres que dan forma a nuestros hogares con amor, fuerza y fe. Pero seamos honestos: el Día de la Madre puede traer emociones encontradas. Algunos de nosotros sentimos alegría y gratitud, mientras que otros sentimos el peso de la pérdida, el arrepentimiento o la decepción. Y eso está bien. La verdad es que no hay mamás perfectas, ni hijos perfectos, y definitivamente no hay familias perfectas.
Te hago una pregunta: ¿Alguna vez has visto una familia que hace las cosas totalmente diferente a la tuya? La realidad es que sólo conocemos lo que hemos visto, las familias de las que hemos formado parte. ¡Y todos somos un poco (o mucho) disfuncionales! Así que, por defecto, trasladamos esta disfunción a nuestros matrimonios.
Favorablemente, hoy veremos tres características de una familia “saludable.” Lo importante en esta clase de familias, no es lo que comen o como se visten sino: ¿Cómo interactúan los padres? ¿Cómo son los hijos? Y ¿dónde está Dios en todo esto?
Pero primero, para que todos nos sintamos un poco mejor con nosotros mismos, veamos algunas familias de las Escrituras que eran más desastrosas que la tuya. Incluso en la Biblia, las “primeras familias” estaban llenas de celos, rivalidad, engaño, traición y desintegración. Desde Adán y Eva hasta David y Betsabé, e incluso los propios discípulos de Jesús, la disfunción familiar no es un problema moderno, sino humano. Pero la buena noticia es esta: Dios no busca familias perfectas. Busca personas dispuestas a confiar en Él en medio de la adversidad.
La familia de Adán y Eva
Te resumo los eventos clave en esta familia: Caín, el hijo mayor, tuvo celos de su hermano menor Abel, cuya ofrenda fue aceptada por Dios mientras que la de Caín no. En un ataque de ira y celos, Caín asesinó a Abel. Más tarde, a Adán y Eva les nació otro hijo llamado Set, y el linaje redentor de Dios continuó a través de él.
Veamos las cualidades disfuncionales en esta familia: celos e inseguridad. Eso lo vemos en la reacción de Caín ante el favor de Dios para Abel. También se ve la incapacidad para controlar la ira que condujo a Caín al asesinato. Además, se ve una falta de rendición de cuentas ya que Caín negó tener conocimiento del paradero de Abel.
La familia de Isaac y Rebeca
Los eventos clave: los hermanos gemelos Esaú y Jacob no podrían haber sido más diferentes. Esaú era un amante de la naturaleza, mientras que Jacob era tranquilo y prefería quedarse cerca de casa. Rebeca favoreció a Jacob y lo ayudó a engañar a Isaac para que robara la bendición de Esaú, creando un profundo conflicto familiar.
Las cualidades disfuncionales en esta familia: primero, vemos favoritismo de parte de los padres. Rebeca favoreciendo a Jacob, Isaac favoreciendo a Esaú. Segundo, el engaño y la manipulación están integrados en esta familia. Lo vemos en el plan de Jacob y Rebeca para engañar a Isaac y robarle la bendición a Esaú. Por último, vemos la confianza rota entre hermanos: Jacob le quitó la primogenitura y le robó la bendición a Esaú. Estos hechos provocan una división prolongada entre los gemelos y sus familias.
La familia de David y Betsabé
Los eventos clave: El rey David tuvo un amorío con Betsabé, que estaba casada con Urías. Para encubrirlo, David dispuso que Urías muriera en batalla. Su primer hijo murió como consecuencia, pero luego tuvieron a Salomón, quien se convertiría en rey. Más adelante en la vida de David, uno de sus hijos, Absalón, encabezó un golpe de estado contra él.
Las cualidades disfuncionales que vemos aquí: abuso de poder y lujuria evidentes en las acciones de David hacia Betsabé. Engaño y encubrimiento al David asesinar a Urías, esposo de Betsabe. Por último vemos el trauma familiar y las consecuencias del pecado en la muerte del niño y rebelión de Absalón entre otras cosas horribles que le pasaron a David.
La familia de Zebedeo (Santiago y Juan)
Eventos clave en esta familia: Santiago y Juan, dos de los discípulos más cercanos de Jesús, eran ambiciosos y de mal genio. En un momento, le pidieron a Jesús que hiciera descender fuego del cielo para destruir una aldea samaritana (Lucas 9:54). En otra ocasión, ellos intentaron asegurar las posiciones más altas de honor en el futuro reino de Jesús (Marcos 10:35-37), causando celos y tensión entre los otros discípulos.
Las cualidades disfuncionales en este último ejemplo: primero, orgullo y ambición. Buscaron un estatus especial sobre los demás. También, vemos impulsividad e ira. ¡Querían que cayera fuego del cielo cuando salieron a predicar y la gente no quería escucharlos! Sobretodo, vemos
ignorancia del liderazgo de servicio. Mal interpretaron la misión de humildad de Jesús. Él vino a servir, no ha ser servido como ellos querían serlo.
Esos son ejemplos de familias disfuncionales. Pero, ¿qué hay de las familias saludables? ¿Cómo se ven? ¿Existe alguna guía bíblica sobre cómo llegar a ser familias saludables? Pues sí. Aquí te damos tres características de una familia saludable:
Característica #1: Familias centradas en Jesús
Este es el Principio #1 de la serie “Guía de Supervivencia para la Crianza“. Pero va más allá de los padres. Es para toda la familia.
Cada familia se centra en algo ya sea dinero, educación, viajes, deporte, éxito y/o la familia. Pero pocos son los que centran sus vidas en Dios. Cuando Jesús está en el centro, hace que las familias funcionen. Primero, porque la Biblia se convierte en la guía de tu hogar. No es tu verdad contra mi verdad sino la verdad de Dios, y Su autoridad.
Segundo, el Espíritu Santo se convierte en la fuente de poder. Ya no se trata solo de tu mejor esfuerzo. Estar centrado en Jesús significa que el Espíritu Santo está EN ti y te capacita para hacer todo lo que viene. En mi familia esto se refleja de la siguiente manera: con respecto a nuestro tiempo, hicimos un verdadero compromiso con la comunidad de la iglesia a asistir a los servicios y a servir. Cuando se trata de las finanzas, nos sacrificamos para ser generosos en la iglesia y se lo hicimos saber a nuestros hijos. Les enseñamos que el dinero no es nuestro sino de Dios y que cuando le damos a Dios, le estamos diciendo que confiamos en Él en todas las áreas de nuestra vida.
Por último, con nuestro ambiente. Creamos un hogar centrado en Jesús modelando disciplinas espirituales como leer la Biblia y orar. También, lo hacemos entablando conversaciones diarias y escuchando música de alabanza.
Cuando una familia tiene a Jesús en el centro de su hogar llega a ser una familia saludable. Pero ojo: digo a Jesús no una religión. Muchos piensan que con ir a la iglesia los domingos y tratar de cumplir la lista de buenos cristianos es suficiente. No lo es. Tener a Jesus en el centro de nuestra familia es amar a Dios y vivir una vida que lo honre. Es llevar imprimido Su voluntad y mandatos en tu corazón y mente como las Escrituras nos lo demandan.
Deuteronomio 6:4-9 (NTV) »¡Escucha, Israel! El Señor es nuestro Dios, solamente el Señor. 5 Ama al Señor tu Dios con todo tu corazón, con toda tu alma y con todas tus fuerzas. 6 Debes comprometerte con todo tu ser a cumplir cada uno de estos mandatos que hoy te entrego. 7 Repíteselos a tus hijos una y otra vez. Habla de ellos en tus conversaciones cuando estés en tu casa y cuando vayas por el camino, cuando te acuestes y cuando te levantes. 8 Átalos a tus manos y llévalos sobre la frente como un recordatorio. 9 Escríbelos en los marcos de la entrada de tu casa y sobre las puertas de la ciudad.
Característica #2: Esposos y esposas que eligen el amor
Este es el Principio 1 de nuestra serie Principios basicos del Matrimonio. La relación más importante en el hogar es la que existe entre mamá y papá. Los niños lo notarán. Esto es saludable. Las familias fuertes se construyen sobre matrimonios fuertes. Cuando los padres priorizan la conexión, emocional, espiritual y física, los niños se sienten seguros y las relaciones florecen. Esto les enseña cómo es tener una relación amorosa.
Esto puede ser tan simple como pasar tiempo en el sofá. Esto comenzó desde que los niños eran pequeños y pasamos y seguimos pasando tiempo en pareja en el sofá casi todas las noches. ¡Cada vez que mostramos afecto, nuestros hijos vienen corriendo para ser parte de los cariñitos!
La cultura moderna describe el amor como un sentimiento que va y viene. Muchas parejas usan este estándar poco realista para medir la calidad del amor en su matrimonio. La Biblia pinta una imagen diferente del amor conyugal: El amor es una decisión, no solo un sentimiento. El amor se basa en una promesa y está representado por nuestros votos matrimoniales.
La analogía definitiva del amor es cómo Cristo ama a su iglesia. Dio su vida por su “esposa” aunque no tenía ganas o ya no lo sentía después de haberse ofrecido a morir por ella.
Efesios 5:25-26 (NTV) Para los maridos, eso significa: ame cada uno a su esposa tal como Cristo amó a la iglesia. Él entregó su vida por ella 26 a fin de hacerla santa y limpia al lavarla mediante la purificación de la palabra de Dios.
Característica #3: Padres y madres que transfieren la responsabilidad
Esta es la ley fundamental de la crianza: Los padres saludables transfieren la responsabilidad de la vida y las decisiones de sus hijos a lo largo de 18 años. Eso es ser padres saludables en la crianza de sus hijos.
Tristemente, hay otras dos opciones un tanto extremas en la crianza de los hijos y que pueden llegar a ser tóxicas. La primera, son los padres controladores que nunca dejan que sus hijos tomen decisiones (autoritarios). La segunda, padres desinteresados a quienes no les importan las decisiones de sus hijos.
Por el contrario, un padre saludable sabe cómo transferir la responsabilidad adecuadamente a lo largo de los años. Esto funciona así:
- Etapa infantil: los padres son los dueños en un 90%
Esto quiere decir que el nivel de control y responsabilidad que tienen los padres en esta fase de desarrollo de un niño es casi total ya que este aún no puede tomar decisiones por sí mismo ni ser independiente.
- Etapa primaria: padres 70/30
En esta etapa, los niños comienzan a desarrollar cierta independencia, pero aún dependen en gran medida de sus padres para la toma de decisiones importantes, el aprendizaje de valores y la supervisión de su desarrollo. El “70/30” indica que los padres todavía tienen la mayor parte del control (70%), pero los niños empiezan a participar más activamente (30%) en sus propias elecciones y responsabilidades.
- Al final de la secundaria:
El estudiante debería ser dueño de sí mismo en un 90%. Los padres transfieren la responsabilidad académica: ahora ellos gestionan las tareas, los hábitos de estudio y las calificaciones. Los padres les permiten administrar más su tiempo, por ejemplo, manteniendo un balance con el trabajo, amigos y responsabilidades. Les enseñan administración financiera a través de trabajos de medio tiempo, presupuestos o cuentas bancarias.
Los involucran en la toma de decisiones familiares y en las conversaciones importantes de la vida para fomentar la madurez. Pasan de la disciplina al diálogo: de imponer consecuencias a orientar la toma de decisiones. La disciplina debe ser constante y con propósito, buscando formar el carácter en lugar de simplemente exigir obediencia. ¿Sabes qué pasará cuando cumpla la mayoría de edad? Llegará a ser un adulto saludable. Pero para que esto suceda, tu padre y madre deben enseñarle cómo.
Proverbios 22:6 Dirige a tus hijos por el camino correcto, y cuando sean mayores, no lo abandonarán.
Que nuestras familias no sean como las tóxicas y disfuncionales que vimos al principio del mensaje. Al contrario, mi deseo es que lleguemos a ser familias saludables poniendo en práctica las 3 características que aprendimos hoy para ser la familia saludable que Dios quiere que seamos. Debemos ser una familia que ponga las pautas para los demás hogares. A la misma vez, estaremos sentando las bases para que nuestros hijos tengan hogares saludables también cuando les toque formar una familia. Pero todo empieza contigo desde hoy.
Ver también:
- Lee los puntos de discusión anteriores en grupo, incluidas las citas bíblicas. ¿Cuáles son tus pensamientos iniciales sobre estos puntos?
- ¿Cómo influye tu familia en tu manera de abordar las relaciones, el matrimonio o la crianza hoy en día?
- De las tres características de una familia saludable, ¿cuál es más evidente en tu hogar? ¿Cuál necesita crecer más?
- Lee Deuteronomio 6:4-9. ¿Cuáles son algunas maneras prácticas de mantener a Jesús en el centro de tu vida familiar?
- ¿Qué significa “elegir el amor” en el matrimonio, incluso cuando es difícil? ¿Cómo se refleja esto en las dificultades de la vida real?
- ¿Cómo te va con la transferencia de responsabilidad a tus hijos? ¿En qué área necesitas soltar con más intención?
- ¿Qué patrones disfuncionales ves en tu árbol genealógico y cómo puedes romper el ciclo con la ayuda de Dios?
Cómo funciona la eternidad
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Puntos de conversación:
- Antes de la resurrección, el Seol (o Hades) era el reino de los muertos, dividido en dos partes: tormento para los injustos y consuelo (el seno de Abraham) para los justos. Lucas 16:22-26
- Jesús cambió la naturaleza del más allá. Después de la cruz y la resurrección, Jesús vació el lado justo del Seol (Paraíso) y llevó a los creyentes al Cielo. Efesios 4:8
- Ahora, los cristianos van directamente a la presencia de Dios al morir. No hay sala de espera, solo entrada inmediata a la presencia de Jesús. 2 Corintios 5:8
- El juicio es definitivo e irreversible. Después de la muerte viene el juicio; no hay reencarnación ni segunda oportunidad. Hebreos 9:27
- El infierno es real y es el destino justo del pecado. La Biblia es clara: quienes rechazan a Cristo enfrentan la separación eterna de Dios. 2 Tesalonicenses 1:9
- La salvación es un regalo gratuito ofrecido por medio de Jesús. No es algo que ganamos; se recibe por gracia mediante la fe en la obra consumada de Cristo. Romanos 3:24, Romanos 10:9
La eternidad es real y todos la enfrentaremos cuando demos nuestro último aliento. Hoy te daremos cinco versículos bíblicos que nos muestran cómo estar preparados para ese día. Compártelo con un amigo usando esta hojita. Pero antes de llegar allí quiero que entendamos dos conceptos relacionados con el “Infierno”.
El primer concepto es el Seol o el Hades. El Seol o el Hades se refiere al “reino de los muertos”. Antes de la cruz y la resurrección de Jesús, todos los que morían, creyentes y no creyentes, iban al “Seol”. Esto lo deducimos por la historia del hombre rico y Lázaro en Lucas 16:19 en adelante.
Lucas 16:22-23 (NTV) »Con el tiempo, el hombre pobre murió y fue llevado por los ángeles para que se sentara junto a Abraham en el banquete celestial. El hombre rico también murió y fue enterrado, 23 y fue al lugar de los muertos. Allí, en medio del tormento, vio a Abraham a lo lejos con Lázaro junto a él.
El Hades, un concepto importado de la mitología griega como traducción griega de Seol (hebreo), es retratado como un lugar de tormento para el hombre rico injusto. Aquí “tormento” es una idea ampliada del concepto del Seol en el Antiguo Testamento.
El Seol se divide en tres partes. Primero está el “lugar de tormento” para los incrédulos (donde fue el hombre rico). Segundo, está el lugar de consuelo para los que creyeron, conocido como “el seno de Abraham” y/o el paraíso (donde está Lázaro). La tercera división es el gran abismo entre los dos lugares.
Lucas 16:26 (NTV) Además, hay un gran abismo que nos separa. Ninguno de nosotros puede cruzar hasta allí, y ninguno de ustedes puede cruzar hasta aquí”.
Este abismo es como un pozo sin fondo. Algunos creen que este “pozo sin fondo” mencionado en la Biblia podría referirse a Tártaro, un concepto que aparece en la mitología griega y en algunos textos cristianos. En el Nuevo Testamento, la palabra “Tártaro” aparece en 2 Pedro 2:4.
2 Pedro 2:4 (NTV) Pues Dios ni siquiera perdonó a los ángeles que pecaron, sino que los arrojó al infierno (“tartarus”), dentro de fosas tenebrosas, donde están encerrados hasta el día del juicio.
El Tártaro mencionado aquí es un lugar de castigo temporal para ciertos seres antes del juicio final. Vemos esto mencionado en el Apocalipsis en los últimos tiempos. Pero aquí está el punto principal: después de la muerte de Jesús, el Seol cambió. La cruz y la resurrección marcaron el momento decisivo de la historia.
Primero, Jesús fue al “paraíso” (lado bueno del Seol) como le dijo al criminal que fue crucificado junto a él cuando se arrepintió y puso su fe en Jesús: “…hoy estarás conmigo en el Paraíso”. Lucas 23:43 (NTV). También proclamó el evangelio allí como dice Pedro:
1 Pedro 3:19 (NTV) Por lo tanto, fue a predicarles a los espíritus encarcelados…
Jesús Vació el “Paraíso” (el lado justo del Seol) y trajo las almas de los fieles muertos al Cielo, ahora que se había cumplido la expiación.
Efesios 4:8 (NTV) Por eso las Escrituras dicen: «Cuando ascendió a las alturas, se llevó a una multitud de cautivos y dio dones a su pueblo».
Desde entonces, los creyentes ya no van al Seol, sino directamente a la presencia de Dios ya que Jesús reubico el Paraíso en “Cielo”. Así que ahora los creyentes que mueren van directamente a la presencia de Dios y ya no al lugar de los muertos como dijo el apóstol Pablo:
2 Corintios 5:8 (NTV) Sí, estamos plenamente confiados, y preferiríamos estar fuera de este cuerpo terrenal porque entonces estaríamos en el hogar celestial con el Señor.
Entonces el Hades o Seol es sólo para los incrédulos pero no es su destino final. El destino final de los incrédulos es el Lago de fuego o el Gehena. El Gehena/el Lago de Fuego es el segundo concepto relacionado con el infierno y se refiere al infierno “final”. Jesús usó el término Gehena en el AT. Se refiere al valle de Hinom en las afueras de Jerusalén, que tenía una historia de sacrificio de niños. Luego se convirtió en un lugar de quema de basura. Jesús lo usó simbólicamente para el juicio final y el castigo de fuego (ej. Lucas 12:5, Marcos 9:43-47, Mateo 5:22, 23:33 y 10:28).
Mateo 10:28 (NTV) »No teman a los que quieren matarles el cuerpo; no pueden tocar el alma. Teman solo a Dios, quien puede destruir tanto el alma como el cuerpo en el infierno.
Jesús también usa “oscuridad de afuera” 3 veces para describir el infierno como un lugar de separación de Dios, de profundo dolor y arrepentimiento (Mateo 8:12; 22:13; 25:30).
En Apocalipsis (p. ej., Apocalipsis 20:10-15), el infierno se presenta como un lago de fuego, la “muerte segunda”, al que son arrojados el diablo, la bestia y aquellos que no están en el Libro de la Vida.
Apocalipsis 20:14 (NTV) Entonces la muerte y la tumba fueron lanzadas al lago de fuego. Este lago de fuego es la segunda muerte.
Con este trasfondo establecido, veamos 5 versículos bíblicos sobre la eternidad.
Hebreos 9:27 (NTV) …cada persona está destinada a morir una sola vez y después vendrá el juicio….
La cultura popular enseña que después de la muerte vienen las alitas angelicales. Nos presentan imágenes caricaturescas. El cielo se muestra frecuentemente como un lugar en las nubes con puertas de perlas, ángeles con halos y alas y personas con túnicas blancas. También enseña que todos vamos al cielo (universalismo) y que si el infierno existe es para los Hitler y Bin Laden del mundo. Shows como Los Simpson, Padre de familia (Family Guy), y South Park a menudo convierten el infierno en un chiste, socavando su seriedad con lo absurdo.
En contraste, la Biblia enseña que después de tu muerte, comparecerás ante Dios para ser juzgado por tus acciones y decisiones en la tierra. No hay reprises ni segundas oportunidades. Esto es cierto para todos los seres humanos, sin excepciones. El infierno es real y la gente va allí.
Romanos 3:23 (NTV) Pues todos hemos pecado; nadie puede alcanzar la meta gloriosa establecida por Dios.
Todo ser humano peca y no alcanza el estándar de Dios. Esto hace que el día del juicio sea una mala noticia. ¿Quién va al Infierno (Hades) según la Biblia? La Biblia dice que el infierno está preparado para el diablo y sus ángeles (Mateo 25:41, Apocalipsis 20). También para los pecadores que no se han arrepentido como dice Gálatas 5:19–21 y Apocalipsis 21:8: »Pero los cobardes, los incrédulos, los corruptos, los asesinos, los que cometen inmoralidades sexuales, los que practican la brujería, los que rinden culto a ídolos y todos los mentirosos, tendrán su destino en el lago de fuego que arde con azufre. Esta es la segunda muerte».
También es para los que rechazan a Cristo como lo leemos en Juan 3:18 y 2 Tesalonicenses 1:8–9: …Él vendrá con sus ángeles poderosos, 8 en llamas de fuego, y traerá juicio sobre los que no conocen a Dios y sobre los que se niegan a obedecer la Buena Noticia de nuestro Señor Jesús. 9 Serán castigados con destrucción eterna, separados para siempre del Señor y de su glorioso poder.
En otras palabras: por defecto, todo ser humano se dirige al infierno. Esto no nos parece justo a muchos de nosotros. Pero eso es porque no lo vemos desde la perspectiva de Dios. Minimizamos nuestro pecado y la necesidad de juicio. Nos decimos: “No soy una mala persona. He cometido errores, pero en general soy bueno. Dios no enviaría a alguien como yo al infierno”. Lastimosamente si, aunque seas bueno, según tu criterio, pero si no has aceptado a Cristo, vas al infierno. Pero aquí es donde entran las buenas noticias…
Gálatas 1:4 (NTV) Tal como Dios nuestro Padre lo planeó, Jesús entregó su vida por nuestros pecados para rescatarnos de este mundo de maldad en el que vivimos.
Jesús fue a la cruz para rescatarnos del juicio venidero. Como Dios, vivió una vida sin pecado y murió como un criminal en nuestro lugar. Este fue el momento decisivo en la historia (tema 5 de La búsqueda) ya que como dice Romanos 3:23-24 (NTV) “Pues todos hemos pecado; nadie puede alcanzar la meta gloriosa establecida por Dios. 24 Sin embargo, en su gracia, Dios gratuitamente nos hace justos a sus ojos por medio de Cristo Jesús, quien nos liberó del castigo de nuestros pecados.”
El plan de rescate está en marcha, pero tenemos que hacer algo para acceder a él. Este “algo” no tiene que ver con buenas acciones ni sacrificios. Es muy sencillo y lo vemos en Romanos..
Romanos 10:9 (NTV) Si declaras abiertamente que Jesús es el Señor y crees en tu corazón que Dios lo levantó de los muertos, serás salvo.
Somos salvos al poner nuestra fe en la obra consumada de Jesús, no en cualquier cosa que podamos hacer. Cada ser humano es personalmente responsable de dar esta respuesta de fe (Tema 6 de La búsqueda). Al poner nuestra fe en Jesús somos salvos porque “Dios nos hace justos a sus ojos cuando ponemos nuestra fe en Jesucristo. Y eso es verdad para todo el que cree, sea quien fuere.” (Romanos 3:22)
Un momento después de tu muerte serás juzgado por una cosa: confiar en Jesús o sea haber aceptado a Jesús como tu Salvador. Los que han aceptado a Jesús irán al Paraíso. Los que no, irán al Hades o sea el infierno. Si quieres ir al paraíso, necesitas poner tu fe en Jesús, y el primer paso es hacer una oración como la siguiente:
La oración del pecador:
“Jesús, reconozco que soy un pecador. Sé que moriste en la cruz y resucitaste de entre los muertos para que yo pudiera tener vida. Ahora me aparto de mi pecado y recurro a ti con fe. Confío sólo en ti para perdonar mi pecado y darme una nueva vida. Gracias por este regalo gratuito. Amén”.
La salvación en última instancia significa el cielo.
Apocalipsis 21:4 Él les secará toda lágrima de los ojos, y no habrá más muerte ni tristeza ni llanto ni dolor. Todas esas cosas ya no existirán más».
Para aquellos que han puesto su fe en Jesús, no hay nada que temer de la muerte. El cielo es un lugar de alegría y libertad más allá de nuestra imaginación más loca. Te hablo un poquito de cómo es el cielo. El cielo
no trata sólo de nubes y arpas. Es un mundo renovado y físico. Apocalipsis 21 describe un cielo nuevo y una tierra nueva, donde la belleza, la cultura y la vida florecen de la manera que Dios planeó desde el principio.
Solía pensar que era una habitación de paredes blancas que ahora me parece una imagen de un manicomio. ¡De ninguna manera! Hay colores y belleza. Es un lugar vibrante lleno de vida plena.
Antes pensaba que las relaciones allí serían inexistentes. Pero no. Estaremos con todos los redimidos. Estas son personas de cada nación y generación. Habrá relaciones profundas y sin pecado y unidad sin conflicto ni miedo.
Sobre todo, el cielo es donde habita Dios con nosotros en gloria pura y sin filtros. Mira como lo narra Juan: “Oí una fuerte voz que salía del trono y decía: «¡Miren, el hogar de Dios ahora está entre su pueblo! Él vivirá con ellos, y ellos serán su pueblo. Dios mismo estará con ellos.” (Apocalipsis 21:3).
Así que así es como funciona la eternidad. La muerte no es el fin para nadie. Tanto los justos como los injustos continúan existiendo. Los injustos van al lugar de los muertos. A la espera del juicio final y del Lago de Fuego.
Los justos van a estar con el Señor esperando los cielos nuevos y la tierra nueva. Nuestra justicia no es algo que ganamos por nuestras obras. Es un regalo de Dios basado en la justicia de Jesús. Es un regalo que alguien puede recibir si pone su confianza en él.
Ver también:
- Lee los puntos de discusión anteriores en grupo, incluidas las citas bíblicas. ¿Cuáles son tus pensamientos iniciales sobre estos puntos?
- ¿Cómo han influido la cultura popular, la familia o la tradición en tu visión de la eternidad o del más allá?
- ¿Qué te sorprende de la visión bíblica del Seol, el Hades y el Gehena?
- ¿Por qué es importante entender que el juicio viene después de la muerte, sin segundas oportunidades?
- ¿Cómo entender el infierno y el juicio aumenta tu aprecio por Jesús y el evangelio?
- ¿Qué parte de la imagen bíblica del cielo te emociona o te reconforta más? ¿Por qué?
- ¿Has puesto tu fe en Jesús para la salvación? Si no es así, ¿qué te detiene?
Cómo funciona la eternidad
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Puntos de conversación:
- Antes de la resurrección, el Seol (o Hades) era el reino de los muertos, dividido en dos partes: tormento para los injustos y consuelo (el seno de Abraham) para los justos. Lucas 16:22-26
- Jesús cambió la naturaleza del más allá. Después de la cruz y la resurrección, Jesús vació el lado justo del Seol (Paraíso) y llevó a los creyentes al Cielo. Efesios 4:8
- Ahora, los cristianos van directamente a la presencia de Dios al morir. No hay sala de espera, solo entrada inmediata a la presencia de Jesús. 2 Corintios 5:8
- El juicio es definitivo e irreversible. Después de la muerte viene el juicio; no hay reencarnación ni segunda oportunidad. Hebreos 9:27
- El infierno es real y es el destino justo del pecado. La Biblia es clara: quienes rechazan a Cristo enfrentan la separación eterna de Dios. 2 Tesalonicenses 1:9
- La salvación es un regalo gratuito ofrecido por medio de Jesús. No es algo que ganamos; se recibe por gracia mediante la fe en la obra consumada de Cristo. Romanos 3:24, Romanos 10:9
La eternidad es real y todos la enfrentaremos cuando demos nuestro último aliento. Hoy te daremos cinco versículos bíblicos que nos muestran cómo estar preparados para ese día. Compártelo con un amigo usando esta hojita. Pero antes de llegar allí quiero que entendamos dos conceptos relacionados con el “Infierno”.
El primer concepto es el Seol o el Hades. El Seol o el Hades se refiere al “reino de los muertos”. Antes de la cruz y la resurrección de Jesús, todos los que morían, creyentes y no creyentes, iban al “Seol”. Esto lo deducimos por la historia del hombre rico y Lázaro en Lucas 16:19 en adelante.
Lucas 16:22-23 (NTV) »Con el tiempo, el hombre pobre murió y fue llevado por los ángeles para que se sentara junto a Abraham en el banquete celestial. El hombre rico también murió y fue enterrado, 23 y fue al lugar de los muertos. Allí, en medio del tormento, vio a Abraham a lo lejos con Lázaro junto a él.
El Hades, un concepto importado de la mitología griega como traducción griega de Seol (hebreo), es retratado como un lugar de tormento para el hombre rico injusto. Aquí “tormento” es una idea ampliada del concepto del Seol en el Antiguo Testamento.
El Seol se divide en tres partes. Primero está el “lugar de tormento” para los incrédulos (donde fue el hombre rico). Segundo, está el lugar de consuelo para los que creyeron, conocido como “el seno de Abraham” y/o el paraíso (donde está Lázaro). La tercera división es el gran abismo entre los dos lugares.
Lucas 16:26 (NTV) Además, hay un gran abismo que nos separa. Ninguno de nosotros puede cruzar hasta allí, y ninguno de ustedes puede cruzar hasta aquí”.
Este abismo es como un pozo sin fondo. Algunos creen que este “pozo sin fondo” mencionado en la Biblia podría referirse a Tártaro, un concepto que aparece en la mitología griega y en algunos textos cristianos. En el Nuevo Testamento, la palabra “Tártaro” aparece en 2 Pedro 2:4.
2 Pedro 2:4 (NTV) Pues Dios ni siquiera perdonó a los ángeles que pecaron, sino que los arrojó al infierno (“tartarus”), dentro de fosas tenebrosas, donde están encerrados hasta el día del juicio.
El Tártaro mencionado aquí es un lugar de castigo temporal para ciertos seres antes del juicio final. Vemos esto mencionado en el Apocalipsis en los últimos tiempos. Pero aquí está el punto principal: después de la muerte de Jesús, el Seol cambió. La cruz y la resurrección marcaron el momento decisivo de la historia.
Primero, Jesús fue al “paraíso” (lado bueno del Seol) como le dijo al criminal que fue crucificado junto a él cuando se arrepintió y puso su fe en Jesús: “…hoy estarás conmigo en el Paraíso”. Lucas 23:43 (NTV). También proclamó el evangelio allí como dice Pedro:
1 Pedro 3:19 (NTV) Por lo tanto, fue a predicarles a los espíritus encarcelados…
Jesús Vació el “Paraíso” (el lado justo del Seol) y trajo las almas de los fieles muertos al Cielo, ahora que se había cumplido la expiación.
Efesios 4:8 (NTV) Por eso las Escrituras dicen: «Cuando ascendió a las alturas, se llevó a una multitud de cautivos y dio dones a su pueblo».
Desde entonces, los creyentes ya no van al Seol, sino directamente a la presencia de Dios ya que Jesús reubico el Paraíso en “Cielo”. Así que ahora los creyentes que mueren van directamente a la presencia de Dios y ya no al lugar de los muertos como dijo el apóstol Pablo:
2 Corintios 5:8 (NTV) Sí, estamos plenamente confiados, y preferiríamos estar fuera de este cuerpo terrenal porque entonces estaríamos en el hogar celestial con el Señor.
Entonces el Hades o Seol es sólo para los incrédulos pero no es su destino final. El destino final de los incrédulos es el Lago de fuego o el Gehena. El Gehena/el Lago de Fuego es el segundo concepto relacionado con el infierno y se refiere al infierno “final”. Jesús usó el término Gehena en el AT. Se refiere al valle de Hinom en las afueras de Jerusalén, que tenía una historia de sacrificio de niños. Luego se convirtió en un lugar de quema de basura. Jesús lo usó simbólicamente para el juicio final y el castigo de fuego (ej. Lucas 12:5, Marcos 9:43-47, Mateo 5:22, 23:33 y 10:28).
Mateo 10:28 (NTV) »No teman a los que quieren matarles el cuerpo; no pueden tocar el alma. Teman solo a Dios, quien puede destruir tanto el alma como el cuerpo en el infierno.
Jesús también usa “oscuridad de afuera” 3 veces para describir el infierno como un lugar de separación de Dios, de profundo dolor y arrepentimiento (Mateo 8:12; 22:13; 25:30).
En Apocalipsis (p. ej., Apocalipsis 20:10-15), el infierno se presenta como un lago de fuego, la “muerte segunda”, al que son arrojados el diablo, la bestia y aquellos que no están en el Libro de la Vida.
Apocalipsis 20:14 (NTV) Entonces la muerte y la tumba fueron lanzadas al lago de fuego. Este lago de fuego es la segunda muerte.
Con este trasfondo establecido, veamos 5 versículos bíblicos sobre la eternidad.
Hebreos 9:27 (NTV) …cada persona está destinada a morir una sola vez y después vendrá el juicio….
La cultura popular enseña que después de la muerte vienen las alitas angelicales. Nos presentan imágenes caricaturescas. El cielo se muestra frecuentemente como un lugar en las nubes con puertas de perlas, ángeles con halos y alas y personas con túnicas blancas. También enseña que todos vamos al cielo (universalismo) y que si el infierno existe es para los Hitler y Bin Laden del mundo. Shows como Los Simpson, Padre de familia (Family Guy), y South Park a menudo convierten el infierno en un chiste, socavando su seriedad con lo absurdo.
En contraste, la Biblia enseña que después de tu muerte, comparecerás ante Dios para ser juzgado por tus acciones y decisiones en la tierra. No hay reprises ni segundas oportunidades. Esto es cierto para todos los seres humanos, sin excepciones. El infierno es real y la gente va allí.
Romanos 3:23 (NTV) Pues todos hemos pecado; nadie puede alcanzar la meta gloriosa establecida por Dios.
Todo ser humano peca y no alcanza el estándar de Dios. Esto hace que el día del juicio sea una mala noticia. ¿Quién va al Infierno (Hades) según la Biblia? La Biblia dice que el infierno está preparado para el diablo y sus ángeles (Mateo 25:41, Apocalipsis 20). También para los pecadores que no se han arrepentido como dice Gálatas 5:19–21 y Apocalipsis 21:8: »Pero los cobardes, los incrédulos, los corruptos, los asesinos, los que cometen inmoralidades sexuales, los que practican la brujería, los que rinden culto a ídolos y todos los mentirosos, tendrán su destino en el lago de fuego que arde con azufre. Esta es la segunda muerte».
También es para los que rechazan a Cristo como lo leemos en Juan 3:18 y 2 Tesalonicenses 1:8–9: …Él vendrá con sus ángeles poderosos, 8 en llamas de fuego, y traerá juicio sobre los que no conocen a Dios y sobre los que se niegan a obedecer la Buena Noticia de nuestro Señor Jesús. 9 Serán castigados con destrucción eterna, separados para siempre del Señor y de su glorioso poder.
En otras palabras: por defecto, todo ser humano se dirige al infierno. Esto no nos parece justo a muchos de nosotros. Pero eso es porque no lo vemos desde la perspectiva de Dios. Minimizamos nuestro pecado y la necesidad de juicio. Nos decimos: “No soy una mala persona. He cometido errores, pero en general soy bueno. Dios no enviaría a alguien como yo al infierno”. Lastimosamente si, aunque seas bueno, según tu criterio, pero si no has aceptado a Cristo, vas al infierno. Pero aquí es donde entran las buenas noticias…
Gálatas 1:4 (NTV) Tal como Dios nuestro Padre lo planeó, Jesús entregó su vida por nuestros pecados para rescatarnos de este mundo de maldad en el que vivimos.
Jesús fue a la cruz para rescatarnos del juicio venidero. Como Dios, vivió una vida sin pecado y murió como un criminal en nuestro lugar. Este fue el momento decisivo en la historia (tema 5 de La búsqueda) ya que como dice Romanos 3:23-24 (NTV) “Pues todos hemos pecado; nadie puede alcanzar la meta gloriosa establecida por Dios. 24 Sin embargo, en su gracia, Dios gratuitamente nos hace justos a sus ojos por medio de Cristo Jesús, quien nos liberó del castigo de nuestros pecados.”
El plan de rescate está en marcha, pero tenemos que hacer algo para acceder a él. Este “algo” no tiene que ver con buenas acciones ni sacrificios. Es muy sencillo y lo vemos en Romanos..
Romanos 10:9 (NTV) Si declaras abiertamente que Jesús es el Señor y crees en tu corazón que Dios lo levantó de los muertos, serás salvo.
Somos salvos al poner nuestra fe en la obra consumada de Jesús, no en cualquier cosa que podamos hacer. Cada ser humano es personalmente responsable de dar esta respuesta de fe (Tema 6 de La búsqueda). Al poner nuestra fe en Jesús somos salvos porque “Dios nos hace justos a sus ojos cuando ponemos nuestra fe en Jesucristo. Y eso es verdad para todo el que cree, sea quien fuere.” (Romanos 3:22)
Un momento después de tu muerte serás juzgado por una cosa: confiar en Jesús o sea haber aceptado a Jesús como tu Salvador. Los que han aceptado a Jesús irán al Paraíso. Los que no, irán al Hades o sea el infierno. Si quieres ir al paraíso, necesitas poner tu fe en Jesús, y el primer paso es hacer una oración como la siguiente:
La oración del pecador:
“Jesús, reconozco que soy un pecador. Sé que moriste en la cruz y resucitaste de entre los muertos para que yo pudiera tener vida. Ahora me aparto de mi pecado y recurro a ti con fe. Confío sólo en ti para perdonar mi pecado y darme una nueva vida. Gracias por este regalo gratuito. Amén”.
La salvación en última instancia significa el cielo.
Apocalipsis 21:4 Él les secará toda lágrima de los ojos, y no habrá más muerte ni tristeza ni llanto ni dolor. Todas esas cosas ya no existirán más».
Para aquellos que han puesto su fe en Jesús, no hay nada que temer de la muerte. El cielo es un lugar de alegría y libertad más allá de nuestra imaginación más loca. Te hablo un poquito de cómo es el cielo. El cielo
no trata sólo de nubes y arpas. Es un mundo renovado y físico. Apocalipsis 21 describe un cielo nuevo y una tierra nueva, donde la belleza, la cultura y la vida florecen de la manera que Dios planeó desde el principio.
Solía pensar que era una habitación de paredes blancas que ahora me parece una imagen de un manicomio. ¡De ninguna manera! Hay colores y belleza. Es un lugar vibrante lleno de vida plena.
Antes pensaba que las relaciones allí serían inexistentes. Pero no. Estaremos con todos los redimidos. Estas son personas de cada nación y generación. Habrá relaciones profundas y sin pecado y unidad sin conflicto ni miedo.
Sobre todo, el cielo es donde habita Dios con nosotros en gloria pura y sin filtros. Mira como lo narra Juan: “Oí una fuerte voz que salía del trono y decía: «¡Miren, el hogar de Dios ahora está entre su pueblo! Él vivirá con ellos, y ellos serán su pueblo. Dios mismo estará con ellos.” (Apocalipsis 21:3).
Así que así es como funciona la eternidad. La muerte no es el fin para nadie. Tanto los justos como los injustos continúan existiendo. Los injustos van al lugar de los muertos. A la espera del juicio final y del Lago de Fuego.
Los justos van a estar con el Señor esperando los cielos nuevos y la tierra nueva. Nuestra justicia no es algo que ganamos por nuestras obras. Es un regalo de Dios basado en la justicia de Jesús. Es un regalo que alguien puede recibir si pone su confianza en él.
Ver también:
- Lee los puntos de discusión anteriores en grupo, incluidas las citas bíblicas. ¿Cuáles son tus pensamientos iniciales sobre estos puntos?
- ¿Cómo han influido la cultura popular, la familia o la tradición en tu visión de la eternidad o del más allá?
- ¿Qué te sorprende de la visión bíblica del Seol, el Hades y el Gehena?
- ¿Por qué es importante entender que el juicio viene después de la muerte, sin segundas oportunidades?
- ¿Cómo entender el infierno y el juicio aumenta tu aprecio por Jesús y el evangelio?
- ¿Qué parte de la imagen bíblica del cielo te emociona o te reconforta más? ¿Por qué?
- ¿Has puesto tu fe en Jesús para la salvación? Si no es así, ¿qué te detiene?