El éxito puede ocultar grietas que el fracaso finalmente revela, pero la tristeza según Dios abre la puerta al arrepentimiento verdadero, y el arrepentimiento verdadero conduce a la renovación, la restauración y una nueva asignación. Con Jesús, el fracaso no tiene por qué ser definitivo.

Haz clic aquí para ver el bosquejo del sermón.

Puntos de conversación:

  • El fracaso puede convertirse en una puerta, no en un callejón sin salida. David muestra la tristeza que viene de Dios y que conduce a un cambio real. Salmo 51:3–4; 2 Corintios 7:10.
  • La humildad es la bisagra que abre la puerta de la renovación. David reconoce su pecado sin excusas y busca la verdad interior. Salmo 51:5–6.
  • El arrepentimiento es más que dejar el mal comportamiento; es la obra recreadora de Dios en el corazón. Salmo 51:7–10.
  • Cuando Dios restaura, Él te reubica en su propósito. El gozo restaurado alimenta un propósito renovado. Salmo 51:12–13.
Discusión:
  1. Lee los puntos de discusión anteriores en grupo, incluidas las citas bíblicas. ¿Cuáles son tus pensamientos iniciales sobre estos puntos?
  2. ¿Por qué crees que el éxito a veces puede crear más peligro para nuestro corazón que la adversidad?
  3. ¿Cuál es la diferencia entre la tristeza según Dios y la tristeza según el mundo en tus propias palabras?
  4. ¿Por qué la humildad es tan esencial para el arrepentimiento? Comparte un ejemplo donde la humildad abrió una puerta para el crecimiento.
  5. ¿Dónde has experimentado que Dios recrea tu corazón en lugar de solo mejorar tu comportamiento?
  6. ¿Quién en tu vida podría beneficiarse al escuchar cómo Dios te ha restaurado?
  7. ¿En qué área necesitas orar la oración de David: “Crea en mí, oh Dios, un corazón limpio”?
Print Friendly, PDF & Email