Fe y Crecimiento

[Mira abajo para ver y discutir este tema.]

Esta es la Lección 1 de e en la serie  Enfrentando la duda. Ver también la Edición Infantil y la Edeción Juvenil  de esta serie.

Enfrentando la duda

La duda viene en muchas formas, pero una de las más comunes es la duda intelectual. La duda intelectual se cuestiona si realmente se puede creer en el cristianismo. Después de todo, somos escépticos y con razón, de los milagros, mensajes de parte Dios, y a los pronunciamientos proféticos. Por lo tanto, si crees en el cristianismo ¿estás simplemente creyendo en un cuento de hadas? Esto puede que no se oiga como algo que se puede discutir en la iglesia. Sin embargo, la Biblia nos muestra que Dios sí quiere que hagamos preguntas como éstas y que enfrentemos nuestras dudas.

[Recursos Relacionados: La serie Fe para los escépticos

AÚN LOS MEJORES AMIGOS DUDARON DE JESÚS

La duda no es un problema nuevo para la gente. Algunos de los amigos de Jesús  dudaron de Él. El ejemplo más famoso es Tomás. Después de la resurrección, Jesús se apareció a sus discípulos, pero Tomás no estaba allí. Más tarde, los discípulos le dijeron a Tomás que Jesús estaba vivo, pero él no les creyó.

Juan 20:25 Ellos le contaron: —¡Hemos visto al Señor! Pero él respondió: —No lo creeré a menos que vea las heridas de los clavos en sus manos, meta mis dedos en ellas y ponga mi mano dentro de la herida de su costado.

Tomás necesitaba una prueba de que Jesús había resucitado de entre los muertos antes de creerlo. Tomás tenía mucho en común con los escépticos contemporáneos. Necesitaba una prueba y nosotros también. Una semana más tarde, Jesús se apareció de nuevo. Él le ofreció una prueba a Tomás. Jesús invitó a Tomás a tocar sus heridas.

Juan 20:28 —¡Mi Señor y mi Dios! —exclamó Tomás.

Tomás creía, pero no con una creencia reservada y racional. El creía en Jesús como su Señor y Salvador. Esta historia nos da una cierta perspectiva de cómo tratar con nuestras dudas intelectuales.

[Tema relacionado: ¿Qué es lo que deberían entender los escépticos acerca del cristianismo

ES BUENO HACER PREGUNTAS HONESTAS

Muchas personas crecieron en iglesias y hogares que no les permitían dudar de su fe o hacer  preguntas. Pero eso no es lo que Dios enseña.

Isaías 1:18 (RVA-1015) “Vengan, pues, dice el SEÑOR; y razonemos juntos”

Dios quiere que involucremos nuestra mente cuando se trata de la fe. Esto significa que es aceptable tener preguntas. Dios no se intimida por tu escepticismo. Dios está seguro de quién es. Él puede manejar tus dudas. Jesús no se salió  de sus casillas por las dudas de Tomás. Por el contrario, aceptó a Tomás en medio de sus dudas. Y si eres un escéptico esta es una buena noticia, Dios te ama también y te acepta con todas tus preguntas.

[Tema relacionado: ¿Cuánta prueba necesito para creer?]

DIOS TE INVITA A ENCONTRAR RESPUESTAS A TUS PREGUNTAS

Dios no quiere vayas por la vida sin ninguna respuesta. Dios te ayudará a encontrar las respuestas a tus preguntas. Y hay buenas respuestas a preguntas como las siguientes:

  • ¿Puedo confiar en la Biblia?
  • ¿Cómo puedo creer en la resurrección?
  • ¿Cómo sé que Dios es real?.

Puedes encontrar respuestas a estas preguntas en buscadeDios.org. Mejor aún, busca a alguien que está un poco más adelantado en su búsqueda de Dios y habla con ellos acerca de tus preguntas. Es importante entender que Dios no va a responder todas tus preguntas, por lo menos a este lado del cielo. Por ejemplo, pueda que no sepas por qué algo trágico te pasó a ti o a un ser querido. Pero Dios contesta las grandes preguntas como las siguientes:

  • ¿Cuál es mi propósito en la vida?
  • ¿Cómo puedo conocer a Dios?
  • ¿Cómo puedo encontrar la felicidad verdadera?

Toma la responsabilidad de buscar las respuestas a tus preguntas. No te limites a hacer preguntas. Busca las respuestas. Y si buscas las respuestas a las preguntas más importantes de la vida serás recompensado, al igual que Tomás.

VER Y COMENTAR:

Enfrentando la duda

 

  1. Preparación: Ver el video juntos o invita a alguien para resumir el tema.
  2. Lee Juan 20:25. ¿Cuánta prueba necesitaste antes de que creyeras en Dios o en el cristianismo?
  3. Lee Juan 20:28. ¿Qué aprendimos del caracter de Jesús por medio de las dudas de Tomás? ¿Cómo eres similar a Tomás?
  4. ¿Alguna vez has tenido dudas intelectuales hacia Dios? ¿Cómo las resolviste?
  5. Lee Isaías 1:18. ¿Cómo afecta esto la manera en que respondes a tus dudas intelectuales?
  6. ¿Cómo puedes buscar de Dios mientras todavía tienes preguntas sin contestar sobre la fe?
  7. Llévatelo: Escribe una medida de acción personal basada en esta conversación.

 

HERRAMIENTAS MINISTERIALES:

Print Friendly, PDF & Email