Fe y Crecimiento

Cuando la vida se pone difícil, ¿confías en ti mismo o en Dios?

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RESUMEN:

Una vida entregada parcialmente
Una cosa es creer en Dios, pero otra cosa es confiar en él plenamente. Un medio cristiano, o cristino cree en Dios, pero no confía en él plenamente y por eso, termina con una vida de entrega parcial. Lamentablemente, muchas personas viven toda su vida de esta manera. Quieren todo lo que Dios tiene para ofrecerles, pero en realidad no confían en él lo suficiente como para recibir esas cosas. Una vida entregada parcialmente dice: “Yo le creeré a Dios en algunas cosas, pero no voy a confiar en él para todo.”

Proverbios 3:5-6 (RVC) Confía en el Señor de todo corazón, y no te apoyes en tu propia prudencia. Reconócelo en todos tus caminos, y él enderezará tus sendas.

Esto suena muy bien, pero la mayoría del tiempo vivimos con nuestra propia versión de este proverbio. Esta es una versión inventada pero describe con mayor exactitud a la cantidad de personas que se acercan a Dios. Esta versión se llama la “versión de entrega parcial” y dice así:

Proverbios 3:5-6 (VEP) Confía en el Señor con una pequeña parte de tu corazón, apóyate en tu propia prudencia, reconoce a Dios en algunos caminos, tú enderezarás tus propias sendas.

No estás solo en tus problemas de desconfianza en Dios
Un hombre lleva a su hijo que ha sido atormentado por un espíritu maligno casi toda la mayor parte de su vida y le pide a Jesús que sane a su hijo. Jesús le pregunta al hombre si cree que Él puede realizar este milagro. Luego surge el siguiente diálogo:

Marcos 9:23-24 (NTV) —¿Cómo que “si puedo”? —preguntó Jesús—. Todo es posible si uno cree. Al instante el padre clamó: —¡Sí, creo, pero ayúdame a superar mi incredulidad!

La mayoría de las personas puede relacionarse con este hombre que quería confiar en Dios, pero estaba luchando por hacerlo. Dios, creo, pero no creo plenamente. Quiero confiar totalmente, pero no siempre confío plenamente,

Tres claves para confiar plenamente en Dios

  1. No confíes en ti mismo

Salomón, la persona más sabia que jamás haya vivido da un consejo profundo a la hora de confiar en Dios. Pero lo que él sugiere es muy contradictorio, contracultural, y no es popular en la cultura actual. Mira de nuevo al siguiente versículo:

Proverbios 3:5-6 (RVC) Confía en el Señor de todo corazón, y no te apoyes en tu propia prudencia. Reconócelo en todos tus caminos, y él enderezará tus sendas.

La versión NTV dice: “Busca su voluntad en todo lo que hagas y él te mostrará cuál camino tomar.”

Salomón, nos dice que no tenemos que depender de nuestra propio entendimiento. No tenemos la sabiduría de Dios; no lo sabemos todo y no podemos predecir el futuro como Dios puede. Así que no es prudente confiar demasiado en nosotros mismos. Más inteligente confiar en Dios.

  1. Recuerda quién es Dios y lo que Él puede hacer

Moisés y los israelitas estaban a punto de algo grande. Israel había sido rescatado de Egipto, habían visto la fidelidad de Dios, se beneficiaron de sus milagros y estaban a las puertas de entrar en la Tierra Prometida. Pero trágicamente permitieron que el miedo les ganara. Dejaron de confiar en Dios plenamente, olvidaron quién es Dios y de lo que Él puede hacer. Su falta de confianza les costó muy caro. Dios quería bendecirlos, pero se lo perdieron porque no confíaron plenamente en su Dios. Así que Dios usó a otro líder para llevar a la próxima generación a la Tierra Prometida.

Josué 1:3, 5, 9 (NTV)  Te prometo a ti lo mismo que le prometí a Moisés: “Dondequiera que pongan los pies los israelitas, estarán pisando la tierra que les he dado… Nadie podrá hacerte frente mientras vivas. Pues yo estaré contigo como estuve con Moisés. No te fallaré ni te abandonaré… Mi mandato es: “¡Sé fuerte y valiente! No tengas miedo ni te desanimes, porque el Señor tu Dios está contigo dondequiera que vayas”».

Dios le recuerda a Josué de quién es Él y lo que Él es capaz de hacer. Esto calma el miedo de Josué y le permite confiar plenamente en Dios.

  1. Pasa tiempo con Dios

Confiar en Dios no es cuestión de  “Voy a obligarme a confiar en Dios o entrenaré mi mente para confiar en Él  o esforzarme mí mismo para confiar en Él.” Nada de eso va a funcionar. Confiar en Dios no es algo que puedas hacer con esforzate. La confianza llega cuando pasas suficiente tiempo con Dios para ver por tí mismo lo fiel y confiable que Él es. Cuanto más tiempo pases con Dios cuánto más vas a confiar en Él.

Hebreos 11:1 (NTV) La fe es la confianza de que en verdad sucederá lo que esperamos; es lo que nos da la certeza de las cosas que no podemos ver.

 


 

PREGUNTAS DE DISCUSIÓN:
Aporta preguntas

  1. Preparación: Ver el video juntos o invita a alguien para resumir el tema.
  2. ¿Qué crees que es lo que se ​​interpone para que las personas confíen en Dios? Haz una lista.
  3. ¿Cuál es el área de tu vida que con el que realmente luchas para confiar en Dios?
  4. Lee Proverbios 3:5-6 y comparte por qué crees que Dios no quiere que dependamos de nuestro propio entendimiento.
  5. Lee Deuteronomio 34:10-11 y comparte cómo te sentirías si tuvieras que seguir a Moisés.
  6. En la Biblia, Dios a menudo le pide a su pueblo que recuerden quién es Él y lo que ha hecho. ¿Qué ha hecho Dios en tu vida o en la vida de alguien que es digno de recordar?
  7. Cuanto más pasamos tiempo con Dios, más vamos a confiar en él. ¿Cuáles son algunas maneras que puedes pasar más tiempo con Dios?
  8. ¿Qué está interponiéndose para que confíes en Dios en tu vida?
  9. Llévatelo: Escribe una medida de acción personal basada en esta conversación.

 


ENLACES Y DESCARGAS:

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